El teniente Evan Arden está sentado en una choza en medio de la nada, esperando órdenes que lo enviarán de regreso a casa, si alguna vez las recibe. Aparte de su leal Gran Pirineo, no hay nadie alrededor para romper la monotonía. El tedio es insoportable, pero se interrumpe repentinamente cuando una mujer joven tropieza en su camino.
Tiene dos opciones: alejarla de la distancia con su confiable rifle de francotirador, o desafiarla a que se acerque a su cabina y entre en su vida.
¿Por qué no? Han pasado años, y por otro lado está solo
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